El dificil arte de crearse una vida nueva

Pues nada, que mi vida sigue patas arriba aunque al menos ya tengo piso dónde aposentarme, ahora corresponde empezar la ardua tarea de armarme un nuevo hogar. Mi nuevo nido es bastante amplio, con ventanales que dejan entrar a raudales la luz y un confortable balcón para salir a tomar el café a la luz de la luna. Lo malo es que todo piso usado tiene las huellas de identidad de sus anteriores propietarios, y el eliminarlas puede llegar a ser complicado y en ocasiones oneroso. Justo en ese paso me encuentro en estos días por lo cual me conecto poco, ya que aún no tengo internet en casa y no está la cosa para gastar en cybercafés, que mejores formas de usar la plata existen. Y el proyecto me ilusiona y desgasta a partes iguales, pues al llegar la noche de un día pleno de actividad veo que casi no he avanzado, y cual Sísifo moderno me pongo a contemplar la piedra que me tocará volver a empujar hacia la cima antes de verla caer de nuevo, o no. En fin, que en realidad este post es una disculpa por las pocas actualizaciones, pues no es que desee desaparecer, es que en estos momentos me estoy construyendo una vida nueva y de esas no venden prearmadas en ikea.

Ponga un friki en su vida

Cuando se es friki, como servidora, se encuentra uno con gente que le mira como si fuese un bicho más raro que un perro verde por gustarle los libros/pelis/juegos de rol/comics y demás linduras de nuestro particular mundo. Lo menos que me ha tocado oir es que me dijesen excéntrica en una oficina donde todo mundo estaba más loco que una cabra, cuando no una expareja que calificaba de ñoños a mis amigos al no poder entrar en nuestras charlas, claro que eso le habría exigido leer un poco, cosa bastante dificil de conseguir.

En fin, que gracias a la internet es que la gente con intereses comunes se contacta y apiña, pudiendo intercambiar sus gustos y aficiones con otros y dejar de sentirse aislada. Y gracias a sitios como CDK en sus momentos, y sedice tras su clausura, he conseguido un grupo bastante nutrido de gente que me aporta cosas muy interesantes dentro de mi afición, por no hablar de amistades realmente entrañables a ambos lados del charco. Y, bueno, ya se sabe que nunca falta en un grupo de intereses comunes que algunos comunes se interesen de más mutuamente, ¿cierto? Como sea, que ahora he puesto un friki en mi vida y las cosas han cambiado bastante, ya podemos ver las pelis juntos y discutir sobre qué personaje es mejor, importándonos un bledo que nos vean raro por defender a Leonardo o Rafaello, a los Transformers o los Decepticons. Y todo eso sin dejar de lado temas sesudos y/o serios, que lo mismo se puede hablar de historia fantástica que de la real, discutir sobre política o sobre CF. Impagable, oiga.

Piratas del Caribe 3, ¿me lo repite otra vez?

Este finde le tocó el turno a Piratas del Caribe en el fin del mundo, y debo decir que pese a los negativísimos comentarios que me tocó escuchar y leer por parte de los críticos la disfruté bastante. Eso si, habría agradecido un poco menos de sucesos, ya que con el guión de esta peli faclmente se desarrollan unas 8 bastante potables. En todo caso, se satura al espectador, mala costumbre que han adoptado las casas productoras y similares que creen que más es mejor. Y es que pasan tantas cosas y hay tantos giros extraños que al final uno no está muy seguro de lo que vió, excepto que fue mucha acción y muchos, muchísimos efectos especiales, tal vez demasiados. Por un lado, tenemos el tema central de la peli, que nos plantearon en la 2: rescatar al Capitán Jack Sparow del más allá, ¿o no? ¿O era el pelear contra "La Compañía" y defender la libre piratería? ¿O era el tema del triángulo amoroso? ¿Quién manda en el Perla Negra? ¿La confrontación con El Holandes Errante? ¿Qué pasó con el corazón de Davey Jones? Bueno, pues eso y muchísimas historias más se entrelzan, al punto que no se sabe bien para donde va la historia, y es que parece que los guionistas aprendieron a pensar como Jack Sparrow y van improvisando sobre la marcha.

Como sea, es encantador ver a Jack reunirse con aquellos a quienes más quiere, en más de un sentido. Y ni hablar de las grandes simpatías que despierta en todos aquellos que le acompañan. Eso si, la trama es muchísimo más retorcida, con traiciones dentro de traiciones dentro de traiciones, cual si las Benegezerit les hubiesen dado un curso express a los piratas. Tal parece que todo munso ha aprendido a pensar como alguien más, y es dificil saber en qién se puede confiar enun mundo donde cada quién va por sus intereses particulares y poco más. Vamos, como en la vida real, pero exagerado un poco. No sé, la peli es basante disfrutable, pero había momentos que sentía que tenía una versión "matrix" de Piratas del Caribe. ¿Talvez debí dejar el cerebro en casa o tendré que verla unas cuantas veces más a ver si me entero? Aunque me da que más bien tanto salto de escena es más bien para dar diferentes niveles al videojuego. Así son las cosas hoy en día.