De las versiones de los directores

Últimamente he visto algunas viejas pelis, cuyos DVDs incluyen los finales del director además del final conocido. Hay veces que el final del director parece tan sólo un pretexto para vendernos el mismo DVD con una chorrada de nada como es el caso de El exorcista, que los cortes de la niña caminando cual araña por la escalera y unos cuantos flashazos de imágenes "diabólicas" no mercen la pena, ni hacen que la obra tome otro significado. Vamos, para el caso podía haberme quedado con la versión comercial.

Otra cosa resulta el visionado de Blade Runner, talvez por la impresionante riqueza que Ridley Scott le imprimió en su momento a ¿Sueñan los andróides con ovejas eléctricas?, donde la obra final supera con creces al libro, apartándose bastante del mismo. Bien, en este caso el DVD está quemado por ambas caras, y si uno no tiene la paciencia de ver completas ambas versiones puede llegar a pensar que la única diferencia se encuentra en que Deccard tarda menos tiempo en pasar por Rachel, y en que no se ve en la versión de Scott el número del apartamento. Sin embargo, el sutil cambio que se introduce en la comprensión de la obra y que le hace acercarse un poco más al sentido que diera Dick al relato tiene que ver con los sueños del prota, acerca de unicornios. Un pequeño giro argumental que nos hace comprender la verdadera naturaleza de nuestro protagonista. Claro está, también la escena de Roy es de las más hermosas que se presentan en la cinematografía de CF, con un replicante más humano que los mismos humanos. Una peli para disfrutar una y otra vez.

Y por último Alien Resurrection, una peli que ha dividido bastante las opiniones de los fans, pues nos muestra una evolución terrible de los aliens, especialmente cuando el ciclo parecía ya cerrado. En lo particular, esta es mi peli favorita de la serie, con una Ripley monstruosa, que se muestra ajena al género humano, y a la vez extremadamente femenina. Este transgénico cultivado que posee un ADN mezcla de alien y humano tiene cierta empatía con los depredadores, que le colocan en otro nivel de actuación que hasta ahora no habíamos podido disfrutar en su personaje. También es curiosa la dicotomía de humanidad-inhumanidad, donde justamente quienes se muestran más empáticos, con más calidad "humana", son aquellos seres que en realidad no lo son. El final del director, bueno, el extendido, ya que el director dice estar más que satisfecho con el final comercial, muestra un futuro más terrible aún que el que puede ser un alien llegando al planeta Tierra. Distopía a la carta.